La fatiga es el resultado de la falta de sueño, que se puede intensificar a partir de la actividad mental prolongada o largos períodos de estrés o ansiedad. ¿Estás frente a un cuadro de fatiga crónica? Cuidado, están en aumento los riesgos a que tengas lesiones, accidentes o una mala decisión en tu desempeño laboral.
La fatiga puede ser aguda, resultado de una mala noche, ya sea por insomnio o alguna reunión social que se prolongó. Pero, la fatiga crónica es un estado a largo plazo que resulta de una pérdida prolongada del sueño necesario. Una deuda de sueño puede acumularse durante semanas o meses. Los síntomas son:
• Cansancio o somnolencia
• Lapsos de memoria
• Dificultad para concentrarse
• Tiempos de reacción más lentos
Los estudios indican que el riesgo de cometer errores en el trabajo aumenta significativamente si los trabajadores duermen menos de lo normal ocho horas, o si están despiertos por más de 17 horas consecutivas. Así, los riesgos laborales de la fatiga son:
• Incapacidad para tomar decisiones
• Incapacidad de hacer una planificación compleja
• Habilidades de comunicación
• Disminución en la productividad y rendimiento
• Falta de atención
• Incapacidad de manejar el estrés
• Reacciones retardadas
• Incapacidad de recordar detalles
• Mayor olvido
Además, a largo plazo la fatiga también puede provocar efectos en la salud, como pérdida de apetito, problemas digestivos y depresión.
Si ya identificaste que padeces este trastorno inicia cuanto antes medidas para retomar tus ciclos de sueño y descanso. Si es necesario acude con el médico para que te ayude a retomar el camino.
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