Un plan de protección personal o familiar caben en un backpack: la mochila de emergencia pronto pasó a formar parte de nuestra cultura de previsión, forjada en los múltiples sismos que ha vivido México, especialmente al centro del país.
Las autoridades de Protección Civil han diseñado un paquete de objetos que resultan útiles en las primeras horas posteriores a un siniestro, especialmente de un terremoto, si bien puede ser útiles en cualquier caso en el que una persona deba quedarse en el exterior, mientras encuentra un refugio seguro.
Agua, linterna, radio de pilas, linterna, batería para cargar el radio y los celulares, son algunos de los objetos que se recomienda tener en esa mochila-salvavidas en la que los documentos importantes deben encontrar un espacio, ya sean impresos y archivados en un folder impermeable, o bien guardados en una unidad de almacenamiento (USB).
Claro, hay una opción contemporánea mucho más práctica: tener esos documentos en la nube, para acceder a ellos desde cualquier lugar, sin el riesgo de extraviarlos en la emergencia. Ahora bien, ¿cuáles serían esos papeles? Los de identificación (actas de nacimiento, credencial de elector, pasaportes) al igual que los que acrediten propiedades (testamentos, escrituras, acciones, etcétera).
Sin embargo, pocas veces se considera que las pólizas de seguros también pueden entrar en este rubro, mucho más si se considera que varias de ellas pueden ayudarle a resolver las pérdidas que pudieran derivar de ese siniestro. Entre ellas destacan:
Los Seguros de Gastos Médicos Mayores (y/o menores).
Seguro de Daños (de muebles e inmuebles) derivados de fenómenos hidrometeorológicos e incendios.
Terremoto o erupción volcánica.
Seguro de Gastos Extraordinarios, que respalda cuando el hogar se vuelve inhabitable debido a alguna de las pérdidas cubiertas.
Remoción de escombros.
Responsabilidad civil por daños a terceros.
Robo.
Considera que si en las primeras horas después de un siniestro, una mochila con barras energéticas y ropa abrigadora puede hacer toda la diferencia, lo cierto es que contar con esas pólizas en tu paquete de emergencias podrán ayudarte a la recuperación a corto y mediano plazo, en términos patrimoniales.
Un seguro de Gastos Extraordinarios, por ejemplo, puede serte útil para pagar un alojamiento temporal, mientras tu Seguro de Daños puede poner en marcha la reparación de tu casa o la recuperación de algunos muebles esenciales que se vieron afectados.
Si no deseas tener esa documentación impresa o en la nube, entonces cópiala en dos o tres USB. Puedes dejar alguna en tu lugar de trabajo y otra más en la casa de alguna persona de gran confianza. De esta forma puedes contar con diferentes respaldos de documentos que te permitirán dar continuidad a tu vida tras una emergencia.
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¿Quieres conocer la lista detallada de la mochila de emergencia? La encuentras, con detalle, en la página del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), pero aquí te enumeramos esos objetos: linterna, agua, radio, alimentos no perecederos, ropa abrigadora, encendedor o cerillos, silbato, documentos personales, copia de las llaves de tu casa, medicamentos y latas de leche.
