Mucho se ha platicado sobre las dificultades que tienen los millennials para ahorrar, la realidad es que sí lo hacen, es una generación ahorradora aunque estos esfuerzos están enfocados a vivir experiencias, más que a planear una jubilación.
Esta falta de previsión, aunado a que su plan de retiro está basado únicamente en la Afore, se convierte en un reto para equilibrar sus ahorros entre diversión y pensión.
Después de pagar la renta, el transporte, la comida y las salidas nocturnas ocasionales, a muchos no les queda mucho margen para ahorrar pensando en la jubilación, o para crear un fondo de emergencia, entonces, ¿qué pueden hacer para comenzar a ahorrar más?
Aquí unas ideas:
1. Págale a tu yo del futuro
La regla dice que debes ahorrar el 10% de tus ingresos, pero si te parece complicado en un inicio, comienza con un monto más accesible, pero constante.
Algunas aplicaciones de banca móvil ya te permiten hacer apartados en automático.
Así que en cuanto recibas tu quincena págale a tu yo del futuro y siempre piensa cómo te gustaría estar viviendo en 40 años, tal vez eso te anime a pagarte mejor.
2. Consigue roomie
Dividir la renta y los servicios es una de las mejores maneras de ahorrar como joven. Súmale el 10% a ese gasto compartido y empieza a ahorrarlo en una cuenta de inversión.
3. Sáltate el cafecito diario
Sabemos que pasar a tu cafetería preferida es un motivador cada mañana, pero ya hiciste cuentas de ¿cuánto gastas en eso al año?
Qué tal si algunos días llevas café preparado en casa y lo que hubieras gastado se va directo al cochinito
4. Cuida los gastos hormiga
Se estima que los mexicanos perdemos hasta 18,000 pesos al año en gastos hormiga, esos pequeños desembolsos que sin darte cuentan merman tu bolsillo.
Cada uno puede tener gastos hormiga distintos. Analiza en qué se te van esos pesos que al final de un año suman miles.
Inclusive revisa suscripciones que tienes dadas de alta en plataformas de música y video, tal vez haya alguna que hace meses no utilizas y ya se ha convertido en un gasto innecesario o haya otras en las que puedas compartir con amigos o hermanos el pago mensual.
5. No hay control sin presupuesto
Podría parecer engorroso y una pérdida de tiempo, pero sin un presupuesto de gastos es difícil saber tus compromisos financieros, tu nivel de endeudamiento y entender en dónde termina cada peso que ganas. Hacer tu presupuesto mensual es una excelente estrategia para darte cuenta si tus compras a meses sin intereses están siendo demasiadas o algún otro rubro en el que podrías bajar el ritmo de gasto e incrementar tus ahorros.
Hay diversas apps que te ayudan a automatizarlo para que sea más rápido y sencillo, MoneyLover, Moneyfy, Wallet, son solo algunas opciones.
6. Transporte alternativo
¿Cuánto podrías ahorrar si caminas un poco hacia el trabajo? Bajar el costo del transporte significará un importante ahorro, pues aunque podrían ser solo unos pesos, es un gasto que haces diario, dos veces al día. Haz cuentas.