Si es la primera vez que compras una propiedad, es probable que hayas escuchado los términos "seguro hipotecario" y "seguro de vivienda" y te preguntes si son lo mismo. Si bien ambos ofrecen cobertura a tu vivienda, son seguros distintos que se complementan.
Los seguros hipotecarios cubren únicamente lo equivalente al saldo insoluto, es decir, lo que adeudas al momento del siniestro; mientras que un Seguro de Hogar contratado de manera particular cubre la pérdida total, el contenido del inmueble y la responsabilidad civil.
Comprender las diferencias entre los dos te ayudará a tener la certeza de que tu patrimonio tiene la cobertura de seguro adecuada. Es importante que sepas que una casa que aún se está pagando y tiene ese seguro hipotecario, pueden contratar una cobertura de Hogar.
¿Seguro hipotecario o seguro de hogar?
La diferencia clave entre el seguro hipotecario y el Seguro de Hogar es a quién protege y su alcance.
El seguro de vivienda o daños protege principalmente al banco o institución financiera en caso de daño a la propiedad por un desastre natural o sismo. Si ocurre un accidente de este tipo y tu casa queda destruída, la aseguradora es responsable de pagar la deuda pendiente con el banco; por lo que es recomendable que siempre lo complementes con un Seguro de Hogar que cubra también el contenido del inmueble y la responsabilidad civil.
El Seguro de Hogar no solo cubre lo que pueda sufrir un inmueble por fenómenos hidrometeorológicos o sismos. También protege al contratante de accidentes como incendios, explosión, robo con violencia, accidentes domésticos, accidentes a terceros causados por miembros de la familia, la servidumbre y hasta por las mascotas, así como gastos extraordinarios, el menaje y los contenidos de la casa. GMX Seguros cuenta con coberturas para todo tipo de riesgos que mantendrán tu patrimonio a salvo.
México es un país sumamente expuesto a eventos catastróficos como terremotos y huracanes, tanto en el Golfo, como en el Pacífico, cuyas consecuencias no pueden enfrentarse sin un respaldo. Pero no solo los desastres naturales son un riesgo que puede tener una propiedad, incendios por un corto circuito, inundaciones por una fuga y hasta romper el vidrio de un vecino, sin querer, son situaciones que pueden ocurrir.
Recuerda que un seguro de Hogar es tan flexible como lo necesites. Puedes asegurar solo el inmueble, solo el contenido (en caso de no ser dueño de la propiedad), o ambos, además de contratar coberturas adicionales dependiendo de los riesgos inherentes a la zona donde vivas por ejemplo, sismos o inundaciones.